Jefe del servicio de OncologÃa médica del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), Rafael López (VillamartÃn de Valdeorras, 1959) conoce el cáncer y sus vericuetos como pocos. Padre de la biopsia lÃquida -espÃa y aliada a la hora de conocer el estado de cada tumor a través de la sangre- se muestra optimista sobre el futuro inmediato de una enfermedad que, asume, cada dÃa será menos letal. -Empecemos por ponerle cifras al cáncer. El pasado año se diagnosticaron en España cerca de 300.000 nuevos casos. Los afectados crecen, las tasas de curación también. -En España tenemos un problema. Estamos trabajando con estimaciones, fundamentalmente de registros locales, por lo que los datos son aproximados. Es necesario tener un registro nacional de cáncer y esto es una demanda de todos los profesionales sanitarios. Dicho esto, cada año aumenta un poco la incidencia del cáncer. Estamos sobre unos 300.000 casos y la supervivencia está superando ya el 60 por ciento a los cinco años. -Oncólogos de referencia estiman que en los próximos quince años, un 70 por ciento de los tumores podrÃan ser curables. ¿Usted también maneja esa estadÃstica? -SÃ, y yo incluso soy un poco más optimista, creo que estaremos entre el 70 y el 80 por ciento. Las iniciativas que se están dando en el mundo occidental y hablando especÃficamente de Europa, están haciendo muchos esfuerzos para intentar controlar la enfermedad. -Hay muchos ensayos que están en fases incipientes, otros que ya han llegado a la clÃnica. Todos apuntan a la oncologÃa personalizada. ¿Cada tumor es un mundo? – Sin duda. Y además de personalizada, tiene que ser evolutiva porque igual que las personas cambiamos, los tumores cambian y el mismo tumor, dentro de un año, puede ser diferente. Es una de las dificultades que afortunadamente empezamos a entender. -Cada dÃa llegan noticias sobre nuevos fármacos, ensayos, tratamientos… ¿hay alguno en el que tenga especial confianza? -Creo que la inmunoterapia dará muy buenos resultados. Después tenemos lo que llamamos los ‘nuevos conjugados’ en los que yo también tengo muchas esperanzas puestas porque es una forma moderna e inteligente de dar la quimioterapia. Vamos a enviarla allà donde es necesaria y a unas dosis suficientemente altas para el tumor, pero no para el resto del cuerpo, con lo que evitamos mucha toxicidad. De estos tratamientos hay ya algunos en el mercado, pero en los próximos años saldrán muchos más. -Hablemos de prevención. El cribado de cáncer de mama y el de colon, son una realidad. ¿Para cuándo el de cánceres como el de pulmón? -El año pasado hubo un documento de Europa precisamente sobre cómo hacer el desarrollo del cribado para pulmón . Recomendaba claramente cumplir los tres cribados establecidos que son el de cérvix, el de colon y recto y el de mama , y después hacer estudios piloto para el cáncer de pulmón, de próstata y el cáncer gástrico, a ver si era factible realizarlos en la población general. Independiente de esto, en el cribado se necesita más investigación para intentar extenderlo a otros tumores como el cáncer de páncreas o el de hÃgado. -La investigación es crucial. Sin embargo, en el caso de España, solo un 1,3% del PIB se dedica a investigación cuando en paÃses de nuestro entorno supera el 3. ¿Ahà tenemos nuestro talón de Aquiles? -Tiene razón. HabrÃa que dedicar mucha más financiación a investigar. Pero hay un detalle, y no quiero defender al gobierno. Evidentemente hay que aumentar el porcentaje público del PIB dedicado a la investigación. Sin duda. Pero el mayor ‘gap’ que tiene España es que no hay dinero privado para investigar. Y no hay dinero porque no hay empresas que quieran investigar, y porque no hay una ley apropiada de mecenazgo que permita la filantropÃa, que es una fuente de financiación en el mundo occidental en el que estamos. -Cerca de donde está usted ahora mismo se está levantando el nuevo centro de protonterapia de Galicia. ¿Cómo le explicarÃa a un ciudadano qué supone la protonterapia en el tratamiento contra el cáncer? -Es la forma moderna y futura de administrar radioterapia. La fundación Amancio Ortega va a poner a España en la primera división de la oncologÃa radioterápica con las diez máquinas que ha donado. Esto va a ser un paso de gigante en la radioterapia, que es una de las herramientas más importantes de las tres con las que contamos para controlar el cáncer. El cambio será radical. -Hábitos de vida y genética. ¿Hasta dónde podemos manejar nuestra salud? -La genética pesa muy poco, entre un 5 y un 10% de los casos. Los hábitos de vida alrededor del 30-35%. Es un sinsentido que todavÃa se vea gente fumando. Yo creo que en los próximos años el esfuerzo estará en prohibir fumar en la calle .