Publicado: abril 24, 2025, 12:08 pm

La presidenta del Colegio Médico (Colmed), Anamaría Arriagada, aseveró que la dura fiscalización por parte del Ministerio de Salud a la emisión de licencias médicas no ha frenado a los facultativos que se dedican a entregar permisos de forma antojadiza.
«La fiscalización draconiana que están haciendo no ha logrado detener a estos grandes emisores, y han aumentado: hace un año eran siete, y hoy son 11. Y nosotros nos preguntamos: ¿Qué están haciendo para identificar a esos 11 que emiten más de 5.000 licencias? Y la respuesta de la autoridad es que no han hecho nada. Eso es lo que nos sorprende», fustigó en El Diario de Cooperativa.
En primer lugar, la dirigenta hizo ver que la preocupación de la autoridad «parte de una premisa que no es real, porque el verdadero indicador importante es el número de licencias por cotizante, que luego de haber subido en la pandemia, ha bajado desde el 2023″.
«Cuando se mira solamente el gasto en licencias, la verdad es que no es un buen indicador, porque también está influido, por ejemplo, por las alzas del sueldo mínimo, por los mayores sueldos de las personas que están cotizando en Fonasa, en fin», explicó.
Con todo, «cuando se habla de los grandes emisores -y esto está en el último informe de la Compin (Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez)- se trata de 11 personas que emiten más de 5.000 licencias. El resto de los médicos emiten menos de 200, y algunos emiten más de eso, que son algunas especialidades, como traumatología».
«Hay como tres niveles: el 80% de los médicos da menos de 200 licencias al año. Hay un porcentaje que da más de 1.500, pero hay 11 emisores que dan más de 5.000, y eso efectivamente es fraudulento, porque no es normal dar como 80 licencias diarias. Sin embargo, un traumatólogo puede dar 1.000 licencias al año», precisó Arriagada.
Criterios imprecisos y problemas técnicos de la Compin
La líder del Colmed subrayó que «no nos negamos a la fiscalización: sabemos que el gasto por licencias es importante, no es el principal de Fonasa (Fondo Nacional de Salud) como se dice, que se lleva todos los puntos de la cotización, porque eso tampoco es cierto (…), pero que la fiscalización sea con criterios claros«.
«Tenemos más de 300 casos de médicos que estamos defendiendo hoy por diferentes problemas con esta fiscalización, o por querellas de las isapres», entre ellos, algunos facultativos que «se enteran tarde de que están siendo fiscalizados, a veces cuando ya viene la multa, o cuando están siendo suspendidos de dar licencias».
«Eso conculca nuestro derecho al trabajo, porque si no pueden emitir una licencia en su consulta o en un hospital, es como no poder dar una receta a la persona (…), eso entorpece la atención y nos afecta justo cuando, además, tenemos encima el foco de la productividad y el problema de las listas de espera. Y en una consulta privada, usted tiene que devolverle el bono al paciente, porque no se puede ir sin su reposo», alertó.
Por lo demás, evidenció dificultades para comprobar la validez de los permisos, pues los médicos deben «subir una serie de informes -50 o más- a una página que no te dice si lo hiciste bien o no, y que cuando dice que los subiste mal, no te permite corregirlos. Y cuando estás siendo sancionado y multado, y vas a defenderte a la oficina de la Compin, la abren dos días durante dos horas. O sea, ni siquiera en el horario normal del sistema público».