Publicado: marzo 2, 2025, 11:41 am
Londres es este domingo el epicentro de la diplomacia europea, con la llegada de líderes clave para una cumbre sobre defensa organizada por el primer ministro británico, Keir Starmer. Antes del inicio del evento y de la ‘foto de familia’, el líder británico … mantuvo reuniones bilaterales únicamente con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, el sábado por la tarde, y con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, el domingo antes de recibir a los demás participantes en el encuentro.
La mandataria italiana destacó la importancia de la coordinación entre los aliados occidentales. «En un momento tan crucial… es muy importante hablar entre nosotros y coordinarnos», afirmó Meloni desde Downing Street. La dirigente italiana, que ha mantenido una firme postura de apoyo a Ucrania, señaló que el objetivo de los países europeos es lograr «una paz justa y duradera» en el conflicto con Rusia.
No obstante, advirtió sobre el riesgo de una fractura en la posición occidental y enfatizó que «el Reino Unido e Italia pueden desempeñar un papel importante como puente» entre distintas posturas dentro de la alianza occidental, en referencia a la buena relación que su país tiene también con la Administración de Donald Trump.
La cumbre se produce en un contexto de creciente presión para que Europa refuerce su compromiso con Ucrania, especialmente ante las señales de distanciamiento por parte de Estados Unidos. Starmer, quien describió la reunión con Meloni como «fantástica», subrayó la importancia de un enfoque coordinado entre los países europeos. «Espero con muchas ganas la oportunidad de hablar hoy sobre los asuntos clave que enfrentamos, creo que los abordamos con una mentalidad muy similar», expresó el primer ministro británico.
Antes de la cumbre, el primer ministro británico ha asegurado a la BBC que trabaja junto con Francia y «posiblemente uno o dos otros países» en un plan para detener los combates y que sería presentado posteriormente a EE.UU.
Mientras tanto, otros líderes europeos expresaron, antes de la cumbre, su postura respecto al fortalecimiento de la defensa en el continente. El primer ministro checo, Petr Fiala, insistió en la necesidad de aumentar la ayuda militar a Ucrania y propuso utilizar los activos rusos congelados para financiarla. «El objetivo para todos nosotros es una paz justa, una paz que perdure», declaró. «Debemos apoyar aún más a Ucrania en términos militares y asegurarnos de que en el futuro sea lo suficientemente fuerte para garantizar la paz a largo plazo».
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Por su parte, el primer ministro polaco, Donald Tusk, instó a Europa a asumir su propia seguridad sin depender de Estados Unidos, argumentando que «Europa es un gigante que ha despertado». En un mensaje antes de partir hacia la capital británica, Tusk señaló que era absurdo que «500 millones de europeos pidan a 300 millones de estadounidenses que los defiendan de 140 millones de rusos». Enfatizó que Europa tiene la capacidad militar suficiente para garantizar su seguridad, pero que falta conciencia sobre este potencial. «El déficit está en la incapacidad de comprender que Europa tiene el potencial para ser una potencia global», subrayó.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, también llegó a Londres para participar en la cumbre, y destacó la importancia del respaldo continuo a Ucrania. «Estoy en Londres esta mañana, trabajando con el presidente Zelenski, el primer ministro Starmer y los líderes europeos para lograr una paz justa y duradera en Ucrania, una paz que garantice la soberanía y la seguridad del país», afirmó en un mensaje en la red social X.
Por otro lado, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, defendió la necesidad de reforzar la seguridad europea a la vez que se mantiene el apoyo a Ucrania. «El camino hacia la paz es la fuerza. La debilidad genera más guerra», publicó en redes sociales antes de dirigirse a territorio británico. «Apoyaremos a Ucrania mientras emprendemos un aumento en la defensa europea».
Con la presencia de figuras clave como Justin Trudeau, Ursula von der Leyen y Pedro Sánchez, la cumbre se perfila como un punto de inflexión en la estrategia de seguridad del continente. Starmer, con su compromiso de elevar el gasto en defensa del Reino Unido al 2.5% del PIB para 2027, busca liderar un esfuerzo europeo más sólido para garantizar la estabilidad en la región.