Registro  /  Login

Otro sitio más de Gerente.com


Los conservadores de la CDU se hacen con la iniciativa de la política migratoria en el Bundestag

Publicado: enero 27, 2025, 3:09 pm

El ataque con cuchillo en Aschaffenburg de la semana pasada tendrá indudablemente consecuencias en el resultado de las elecciones anticipadas del próximo 23 de febrero, en Alemania. Un refugiado afgano de 28 años, que debería haber sido deportado en 2024, se lanzó contra un grupo de niños de guardería que jugaba en un parque y asesinó a uno de ellos, de dos años, y a un adulto que intentó proteger al resto.

Debido a que padece un trastorno con brotes psicóticos, el agresor ni siquiera irá a juicio. A un mes de las elecciones, cuesta pensar que estos asesinatos no pongan en cuestión la política de asilo y que no agiten el voto a favor de la extrema derecha de AfD. Pero a diferencia de los múltiples ataques anteriores, el líder de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Friedrich Merz, no se ha quedado esta vez en la reacción de horror y condolencias, sino que ha pasado además a la acción política. Ha anunciado la presentación en el Bundestag de dos mociones para endurecer la política migratoria, una de ellas requiere la reforma de la Ley de Asilo, esta misma semana.

Las fronteras de Alemania quedarían definitivamente cerradas a cualquiera sin permiso o documentación en vigor para cruzarlas y las personas sin derecho a residencia en Alemania permanecerían retenidas hasta el momento en que se hiciera efectiva su deportación, según el plan de cinco puntos que hoy ha presentado a la directiva del partido para su visto bueno. Ambas mociones no son leyes, sino una llamada al gobierno federal, por lo que pueden ser aprobadas por mayoría simple y obligan a todos a retratarse.

Pero, aunque el preámbulo del documento contiene todo un artículo de repulsa contra AfD, es muy previsible que la extrema derecha vote a favor de las mociones en el parlamento. Este apoyo abriría una brecha en el cortafuegos que Merz ha defendido hasta ahora sin fisuras. Así lo interpreta al menos el vicecanciller alemán y ministro de Economía, el verde Roberta Habeck, que traduce que «Merz está abriendo la puerta al trabajo y a la colaboración con la extrema derecha y está rompiendo un consenso básico entre los grandes partidos de centro». «Ahora es realmente el momento de tomar decisiones», ha justificado sin embargo el líder conservador, que ha obtenido el si de la CDU para llevar la cuestión al Bundestag este mismo miércoles.

La recesión económica estaba destinada a ser el principal asunto de la campaña electoral hasta lo sucedido en Aschaffenburg, que ha devuelto el protagonismo a la política migratoria. El canciller Scholz había anunciado una declaración de gobierno ante el pleno del parlamento para el miércoles y en esa misma sesión tendrá que hacer frente a esta ofensiva de la CDU. A Merz no le preocupan los votos de AfD: «Lo que está bien en la materia no se convierte en malo porque la gente equivocada esté de acuerdo», ha defendido. El secretario general del SPD, Matthias Miersch, ha criticado sin embargo que «lo que Mer y la CDU están planeando es una violación sin precedentes de tabúes en la historia de posguerra de la República Federal de Alemania.

Merz ha dejado claro que se trata de medidas «para reducir drásticamente las cifras todavía demasiado altas de inmigración ilegal a Alemania», que requerirán más lugares para la detención de deportación y controles fronterizos permanentes. Esto choca con la legislación europea y «no debería ser propuesto por un aspirante a gobernar Alemania», ha reprochado Scholz. El Partido Socialdemócrata (SPD) se opondrá con sus propias propuestas: exige la implementación del paquete de seguridad bloqueado por la CDU/CSU y la Ley de la Policía Federal. Esto implica, entre otras cosas, equipar mejor a las fuerzas de seguridad, acelerar los procedimientos de asilo y la celebración de acuerdos migratorios con los principales países de origen. El SPD también quiere asegurarse de que los peligros que representan las personas con enfermedades mentales se reconozcan y registren mejor.

El Partido Liberal (FDP), por su parte, votará a favor de las mociones de la CDU. El secretario general, Marco Buschmann, ha llamado a los partidos democráticos que no permitan que AfD les imponga un «bozal». Los demócratas no deberían «dejar que la AfD dicte cómo se comportan», ha dicho, «la propuesta de Merz va en general en la dirección correcta« y es »digna de apoyo«. Queda por saber qué hará exactamente AfD, partido al que molestan las críticas explícitas a esta formación política en el texto de propuesta, que acusa a AfD de utilizar los problemas, preocupaciones y miedos »para agitar la xenofobia y hacer circular teorías de conspiración«. Por lo tanto, el partido »no es un socio, sino nuestro oponente político«, deja claro el texto. »La difamación de los opositores políticos en las mociones del Bundestag alemán no cumple con los buenos estándares parlamentarios«, ha respondido el colíder de AfD, Tino Chrupalla. La candidata a la cancillería de AfD, Alice Weidel, ha publicado en X: »Los ciudadanos no quieren juegos tácticos, quieren el cambio de rumbo migratorio«.

Related Articles



Advertisement