Publicado: mayo 26, 2025, 11:01 am
Cada vez más, en España circulan informaciones sobre las consecuencias nocivas para la salud del consumo de alcohol, al que numerosos estudios científicos vinculan con el riesgo de desarrollar algunos tipos de cáncer. Pero es que, además, las bebidas alcohólicas pueden interactuar negativamente con determinados medicamentos, por lo que hay que tener precaución.
Concretamente, y en plena época de alergias como es la primavera, los antihistamínicos son medicamentos que se prescriben para combatir los síntomas de esta hipersensibilidad tan común. Pues bien, mezclar estos medicamentos con la ingesta de alcohol no es una buena idea, como explica el farmacéutico Guillermo Martín Melgar en un vídeo publicado en sus redes sociales.
Antihistamínicos y alcohol, sueño multiplicado
Melgar explica en sus redes, en primer lugar, que la ingesta de alcohol es una mala compañera de viaje pero que, si se toma, hay que tener en cuenta una serie de interacciones que podrían desencadenarse y que, en el mejor de los casos, van a multiplicar por mil la somnolencia.
«Si los antihistamínicos está demostrado que provocan sueño, y el alcohol también da somnolencia, la consecuencia normal es que si mezclamos ambos vayamos a tener mucho, pero que mucho sueño», comienza aclarando. En este contexto, eso sí, el experto diferencia los efectos secundarios, «que van a variar dependiendo del tipo de antihistamínico«.
Diferentes antihistamínicos, distintas reacciones
En función de la ‘generación’ del medicamento, así va a afectar de una manera u otra. «algunos de estos medicamentos van a afectar al sistema nervioso central«. En este caso, como puede ser el de la doxilamina, está absolutamente desaconsejado tomar nada de alcohol.
Otros antihistamínicos, los que pertenecen a la segunda generación, también afectan directamente al sistema nervioso central, aunque en este caso, «el impacto es de un menor grado de importancia. Estos medicamentos (cetiricina, loratadina) de segunda generación, también pueden afectar de manera directa al nivel de sueño, aunque en este caso, el impacto depende más de las características de la persona«.
El experto finaliza el vídeo divulgativo explicando que «los antihistamínicos más seguros para la posible mezcla con el alcohol son la bilastina y la desloratadina. Estos medicamentos aportan un efecto sedante que en ningún caso va a verse potenciado por el consumo de alcohol«.
De todo esto se deduce que, en caso de tomar medicamentos para combatir la alergia primaveral, lo más recomendable es consultar con el médico las posibles interacciones si se puede tomar alcohol (considerando esto siempre con moderación).
