Cada vez somos más conscientes de los beneficios de la fruta para alcanzar un buen estado general de salud. Si antes se la veÃa como un mero complemento a la dieta principal, a tomar muy de vez en cuando, en los últimos años la investigación alimentaria parece haber concienciado a la población sobre hasta qué punto es una gran aliada. Entre sus grandes beneficios está su protección del sistema cardiovascular. ¿Cuáles serÃan las más beneficiosas en este sentido?
La información sobre nutrición y dietética interesa cada vez más y abunda en las redes sociales. La población busca qué dieta es más adecuada para los objetivos a conseguir y en este sentido la fruta ha pasado a tener un papel protagonista. Influencers de toda condición animan al consumo de este alimento, de forma que los zumos, smothies y ensaladas con frutas son contenidos habituales en redes.
Según las últimas cifras de consumo por cápita en España, el plátano parece tener una posición imbatible, con un promedio anual de 13 kilos por persona, más del 16 por ciento de la cifra total. Sin embargo, las fresas y fresones, excelentes para proteger el sistema cardiovascular, se encuentran muy por debajo de ese consumo, exactamente en el décimo lugar, con 2,1 kilos anuales por persona.
La clave es la vitamina C
Lo que convierte a las fresas en una excelente opción si nos preocupa nuestro sistema cardiovascular es su poder antioxidante. ¿Cómo ayudan a que el funcionamiento del corazón, las venas y las arterias sea el más saludable? Tienen varias acciones fundamentales, como ayudar a controlar una correcta presión arterial, reducir el riesgo de inflamación y también el estrés oxidativo. El secreto está en su potente contenido vitamÃnico, especialmente de vitamina C, flavonoides, antocianinas y ácido elágico.
Pigmentos que protegen a las mujeres jóvenes
Los arándanos comparten muchas caracterÃsticas nutritivas con las fresas, como su potente contenido de vitamina C, asà como de minerales (hierro, yodo, calcio, fósforo, magnesio y potasio), antocianinas y carotenoides, pigmentos con efecto antioxidante. Los arándanos han ido ganando enteros en la dieta española con el paso de los años: de ser un simple extra en zumos y ensaladas a tener una presencia más continuada en las cocinas.
Estas dos frutas se han revelado además como aliadas especiales de la salud cardiovascular de las mujeres jóvenes, tal y como ha constatado un estudio de la Escuela de Salud Pública de Harvard. El ensayo ha confirmado que un alto consumo de antocianinas, compuestos importantes tanto en fresas como en arándanos, puede reducir el riesgo de infarto agudo de miocardio en este grupo poblacional.
Referencias
Fundación Española del Corazón (s.f.). Los arándanos y las fresas protegen tu corazón. https://fundaciondelcorazon.com/blog-impulso-vital/2526-arandanos-fresas-proteger-corazon.html