Publicado: noviembre 8, 2025, 6:25 pm
La tos es un mecanismo reflejo complejo que permite en funcionamiento nuestros pulmones evitando la aspiración de cuerpos extraños o liberando la vía aérea de secreciones mediante una espiración violenta. Es, además, uno de los principales síntomas de virus respiratorios y resfriados. Dependiendo de la causa, la tos es diferente. Un artículo publicado por The Sun recoge que hay siete tipos distintos.
Tos por infecciones
Las toses causadas por infecciones, ya sean virales o bacterianas, tienden a durar menos de tres semanas y pueden provocar malestar general, fiebre e inflamación de las glándulas. Si ese es el caso, probablemente sufrirás ataques de tos durante todo el día, además de notar que tienes más mocos de lo normal.
Ejemplos son la laringitis (tos ‘perruna’ y respiración áspera), la tos ferina (tos violenta y seca con un sonido agudo y sibilante al inspirar) o la bronquitis (tos con mucosidad).
Tos por asma
El asma es una afección pulmonar que suele ser hereditaria y que desencadena una respuesta inmunitaria en el sistema respiratorio, lo que provoca inflamación de las vías respiratorias inferiores. Los síntomas incluyen tos —que puede empeorar por la noche o después de hacer ejercicio—, sibilancias y opresión en el pecho.
Tos nasal y sinusal
Las afecciones que afectan la nariz y los senos paranasales pueden provocar tos aguda o crónica. La sinusitis o la rinitis, que pueden tener origen alérgico, son ejemplos de ello.
Tos por reflujo ácido
En la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), el ácido de tu estómago puede subir por el esófago hacia la garganta, lo que produce reflujo ácido. Esta afección también puede provocar tos seca. Se cree que este reflejo de la tos sirve para proteger las vías respiratorias de las microgotas de ácido que puedan entrar.
Tos por efectos secundarios de medicamentos
Algunos medicamentos pueden provocar una tos seca que tiende a persistir mientras se utilizan, sobre todo los los inhibidores de la ECA, que se utilizan para controlar la presión arterial alta. Otros medicamentos pueden provocar tos al desencadenar un broncoespasmo, que consiste en un estrechamiento de las vías respiratorias.
Tos del fumador y afecciones pulmonares crónicas
Ciertas afecciones médicas que afectan las vías respiratorias pueden provocar una tos persistente. Entre ellas se incluyen la enfermedad obstructiva crónica de las vías respiratorias, que a menudo es el resultado de una inflamación prolongada de las vías respiratorias (enfisema), daños a largo plazo en el tejido pulmonar y cáncer de pulmón.
La EPOC también suele provocar dificultad para respirar, infecciones torácicas frecuentes y sibilancias.
También está la llamada tos del fumador, una respuesta del cuerpo a la irritación causada por el humo del tabaco, y es un mecanismo de defensa para expulsar mucosidad y partículas de los pulmones
Tos por coágulos de sangre
En algunos casos, la tos puede ser un signo de un coágulo de sangre. Los síntomas de la emergencia sanitaria incluyen tos, dificultad para respirar, dolor agudo en el pecho y ritmo cardíaco acelerado. También puedes toser sangre.
