Publicado: julio 8, 2025, 9:26 pm
El Chelsea es el primer equipo en alcanzar la final del Mundial de Clubes. El cuadro londinense derrotó este martes al Fluminense, el único equipo no europeo que quedaba en la competición, gracias a dos auténticos golazos de Joao Pedro.
El Chelsea se sintió superior desde el pitido inicial y poco a poco fue controlando el choque, con el equipo brasileño tratando de refugiarse con orden atrás y de intentar sorprender al contragolpe. Sin ocasiones claras, apareció por primera vez Joao Pedro, en su segundo encuentro con los blues, para firmar un gran disparo parabólico dentro del área y poner el partido aún más cómodo para su equipo.
Malo Gusto pudo hacer el 0-2 poco después con un cabezazo demasiado centrado y sin problemas para Fabio, pero fue el Fluminense el que pudo lograr el 1-1 en su primera buena llegada. Hércules se plantó solo ante Robert Sánchez y cuando su disparo se colaba se topó con la llegada salvadora sobre la línea de un atento y rápido Marc Cucurella.
Esta ocasión animó al equipo de Renato Gaúcho, que vio como el VAR le anulaba el penalti por mano de Chalobah y como Hércules no acertaba a controlar un buen centro y cuando estaba en una buena posición para rematar ante el portero español. Antes del descanso, el Chelsea avisó únicamente con una rápida transición de Pedro Neto, bien salvada por la defensa.
Pero el paso por vestuarios trajo el renovado dominio del campeón de la Conference League. El equipo de Enzo Maresca subió sus líneas, metió una marcha más y asfixió de inicio a su rival, principalmente con disparos desde fuera del área, sobre todo uno que se fue por poco cerca del palo de Cucurella.
De todos modos, el ‘Flu’, que había pasado a defender con línea de cuatro en busca de mejorar arriba, aprovechó esta agresividad para tener su mejor opción de empatar con un contragolpe de Everaldo, cuyo disparo detuvo un bien colocado Robert Sánchez. El equipo brasileño quiso dar un paso adelante y lo pagó porque el conjunto londinense lo cazó en un contragolpe, certificado con un potente disparo de Joao Pedro para sentenciar el choque antes de la hora de partido.
A partir de ahí, el partido se fue muriendo porque al Fluminense le faltaron mejores argumentos y sus cambios no tuvieron efecto. Maresca también fue moviendo el banquillo de un equipo que gozó de mejores ocasiones para haber ganado con mucha más autoridad, sobre todo una de Christopher Nkunku que sacó bajo palos un defensa y una de Nico Jackson, demasiado egoísta cuando tenía totalmente solo a Cole Palmer.