Publicado: junio 25, 2025, 5:00 am
Descansar de la manera correcta por las noches es una de las claves fundamentales para mantener la salud, según todos los expertos y numerosos estudios científicos que lo avalan, a pesar de que solo un tercio de la población en España consigue un sueño reparador. Durante las fases profundas del sueño se recuperan funciones vitales, se fortalece el sistema inmunológico y se ‘resetea’ el cerebro.
Dentro de las medidas que están en nuestra mano para mejorar el descanso, está la alimentación, por ejemplo, con productos ricos en triptófano (directamente relacionado con la melatonina, hormona del sueño). Uno de los mejores antes de irnos a dormir es, según los expertos, la miel.
Los ronquidos impiden el buen descanso
El estilo de vida actual ayuda muy poco a mantener una higiene del sueño correcta. El estrés, el sedentarismo, una dieta cargada de ultraprocesados y azúcares, cenar demasiado tarde sin tiempo de margen para hacer la digestión… El insomnio, de hecho, es uno de los grandes problemas en la sociedad, que afecta a ciudadanos cada vez más jóvenes.
Dormir mal de manera habitual implica el desarrollo de un gran número de enfermedades. Esto, en lo que se refiere a los desencadenantes. Pero es que también son habituales entre la población adulta los ronquidos (40 por ciento), ya sea provocados por apnea del sueño, o por otros motivos que obstruyen parcialmente la respiración mientras dormimos.
Roncar añade un elemento aún más problemático para dormir, puesto que ese sonido fuerte llega a ser molesto y, en muchos casos, a despertar al afectado. Y ahí comienza el círculo vicioso.
¿Por qué se producen los ronquidos?
Entre las causas más habituales que ocasionan el ronquido están el sobrepeso, que puede causar la acumulación de grasa en la zona de la garganta, lo que dificultaría la respiración; el consumo de alcohol, que relaja la musculatura de la garganta y la lengua; o las vegetaciones (crecimiento desmedido de los tejidos de la garganta).
Para quienes tienen en los ronquidos su caballo de batalla para poder descansar, los expertos recomiendan un alimento que, tomado poco antes de acostarse, podría aliviar este problema de salud tan común. Hablamos de la miel, cargada de propiedades relajantes y triptófano, un aminoácido que ayuda a producir melatonina (hormona que regula el sueño) y serotonina.
Pero es que, además, la miel calma la irritación de garganta, al tiempo que disminuye la presión arterial. Este producto natural es rico en antioxidantes y polifenoles, que reducen los niveles de estrés. Además, la miel es antiinflamatoria y antimicrobiana, atajando la inflamación de la garganta y manteniendo abiertas las vías respiratorias para evitar que aparezca el ronquido.
¿Cómo tomar la miel para dormir mejor?
En cuanto a los consejos sobre la ingesta de este superalimento, los expertos recomiendan tomarlo en infusión, mezclada con manzanilla, menta o eucalipto, una hora antes de acostarnos para relajar la musculatura de la zona y facilitar el flujo de aire. La miel también puede tomarse con limón, que va a aliviar bastante la congestión. Y, por supuesto, sola.
Además de tomar miel poco antes de irnos a dormir, conviene que sigamos una serie de rutinas que ayudarán a conciliar el sueño. Una de ellas es dormir de lado, puesto que esta postura abre las vías respiratorias y reduce los ronquidos que podrían despertarnos.
Evitar cenas copiosas y el consumo de alcohol a última hora del día, beber mucho agua y usar un humidificador que favorezca el ambiente, así como consultar al médico en caso de que los ronquidos no desaparezcan es imprescindible para conseguir el buen descanso.