Publicado: mayo 10, 2025, 6:53 pm
Un grupo de investigadores estadounidenses ha presentado el primer implante anticonceptivo del mundo para hombres, que ya ha superado la fase de ensayos clínicos y con resultados prometedores.
Se trata de un anticonceptivo implantable, no hormonal, conocido como Adam, que consiste en un hidrogel soluble en agua que se implanta en los conductos espermáticos, impidiendo que los espermatozoides se mezclen con el semen.
El hidrogel está diseñado para descomponerse en el cuerpo después de un período de tiempo determinado, restaurando la fertilidad, lo que según Contraline, la compañía estadounidense detrás del producto, lo convierte en una alternativa reversible a los condones y las vasectomías.
En la primera fase de su ensayo clínico, Contraline descubrió que ADAM podía bloquear con éxito la liberación de espermatozoides durante 24 meses, sin que se detectaran espermatozoides en el semen de los dos participantes que habían llegado a este punto del ensayo. La empresa añade que hasta el momento no se han registrado efectos adversos graves.
Alexander Pastuszak, director médico de Contraline, dice en declaraciones recogidas por el Mirror: «Nuestro objetivo era crear una opción anticonceptiva masculina que durara dos años y que respondiera directamente a las necesidades de los consumidores».
Los 25 participantes del ensayo clínico se inscribieron en diferentes momentos, y se espera que se publiquen más resultados próximamente. El implante se inserta mediante un procedimiento mínimamente invasivo que dura diez minutos y precisa anestesia local, por lo que el paciente permanece despierto.
El estudio Adam se presentó en la reunión de la Asociación Urológica Estadounidense el 26 de abril. La compañía de anticonceptivos ha anunciado que ha recibido la aprobación regulatoria completa para iniciar su estudio clínico de fase dos en Australia, que comenzará en el tercer trimestre de 2025.
Contraline describe esta aprobación como un «hito importante en el desarrollo de anticonceptivos masculinos reversibles y de larga duración, que allana el camino para un progreso acelerado y un impulso global hacia la muy necesaria innovación en salud reproductiva».