Publicado: mayo 23, 2025, 4:00 pm
La inflamación es una respuesta del sistema inmune ante lo que percibe como un daño en el organismo. En el caso de la inflamación digestiva, hablamos de esa reacción que va acumulando daño crónico en el organismo, en la mayorÃa de los casos ocasionada por una dieta desequilibrada, excesiva en ultraprocesados, azúcares, grasas saturadas, y escasa en productos naturales y saludables.
Cuando sometemos al organismo a una inflamación permanente, estamos abonando el campo para que se desarrollen enfermedades crónicas que podrÃan evitarse con un estilo de vida adecuado. De todos los alimentos (por llamarlo de alguna manera) desaconsejados por los expertos, hay uno aparentemente inofensivo y especialmente nocivo según la nutricionista Sandra Moñino: el chicle.
Un plástico con edulcorantes desaconsejado
La nutricionista Sandra Moñino, autora del libro ‘Adiós a la inflamación’ en el que propone un plan antiinflamatorio de tres dÃas, publica un vÃdeo en sus redes sociales en el que analiza los ingredientes de un chicle cualquiera, para que nos demos cuenta de lo peligroso que puede llegar a ser para la salud su consumo habitual.
«El chicle, aunque parezca un producto simple sin mucho efecto negativo en su haber, es uno de los ‘alimentos’ más proinflamatorios que existen», explica. Y añade: «SÃ, el chicle te inflama, y te voy a explicar por qué». En la lista de componentes de cualquier chicle en el mercado, aunque se comercialice como ‘sin azúcar’, vamos a encontrar una serie de edulcorantes absolutamente desaconsejados no sólo porque no aportan ningún nutriente, sino porque en algunos casos llegan a ser tóxicos y a poner en peligro la salud.
Estos son los ingredientes de cualquier chicle
Moñino analiza la composición de un chicle cualquiera. «Pone que es sin azúcar y encima podrÃa parecer que es de lo más saludable. Pues no es asÃ. Cualquier chicle tiene sorbitol y manitol, edulcorantes tÃpicos de cualquier ultraprocesado«.
Pero es que, además, estos plásticos cargados de sustancias quÃmicas «también contienen jarabe de maltitol y sucralosa y, lo que es mucho peor, productos como aspartamo o acesulfamo K, edulcorantes prohibidos en muchos paÃses por su elevado Ãndice de toxicidad (y desaconsejados por la Organización Mundial de la Salud), y porque tienen muchas probabilidades de llegar a ser cancerÃgenos».
Muchos productos que llevan edulcorantes como los refrescos light se ‘venden’ como más saludables por no contener azúcares refinados. Sin embargo, no tienen nada de inocuos. Sin ir más lejos, el aspartamo está asociado en numerosos estudios con un mayor riesgo cardiovascular y con los picos de glucosa, lo que desemboca en inflamación. También se relaciona con el cáncer. Antes de comer chicles sin control, conviene mirar la composición y ser conscientes, como dice la nutricionista, de que son «un plástico con edulcorantes».
Referencias
Elio Riboli, Frederick A. Beland, Dirk W. Lachenmeier, M. Matilde Marques, David H. Phillips, Eva Schernhammer, Abdul Afghan, Ricardo Assunção, Giovanna Caderni, J. Christopher Corton, Gisela de Aragão Umbuzeiro. ‘Carcinogenicity of aspartame, methyleugenol, and isoeugenol’. Publicado en The Lancet Oncology. Consultado online en https://www.thelancet.com/journals/lanonc/article/PIIS1470-2045(23)00341-8/abstract el 22 de abril de 2025.