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Las tradiciones de la Fiesta de la Primavera varían según las regiones, pero la emoción festiva es siempre la misma. Las animadas actividades populares son el recuerdo más cálido y feliz en el corazón de los chinos. Las actividades representativas del patrimonio cultural inmaterial de nivel nacional que están incluidas en la Fiesta de la Primavera son diversas y coloridas, lo que crea una atmósfera festiva intensa.
El salto de la mesa floral
La saloma de Pei Baolin, quien tiene 80 años, rompe el silencio. Al llegar el duodécimo mes del calendario lunar chino, comienzan las actividades de ensayo para elevar la mesa floral en el distrito de Yongnian, ciudad de Handan, en la provincia de Hebei.
Los cantos de saloma anuncian la llegada de la primavera y la gente acude masivamente a la calle para disfrutar del bullicio de la vida. En el templo Guanyin de Linmingguan, cada desfile de mesas florales está compuesto por unas 40 a 50 personas. Al frente marchan los equipos de danza de Yangge (una forma de danza folclórica china) o de dragón, seguidos por una escolta de portadores de banderas, y al final, la mesa floral. Los que levantan las mesas llevan trajes al estilo antiguo, con bigotes, fuman pipas de tabaco, avanzan y retroceden, y sus pasos de baile son tan rápidos que es difícil seguir el ritmo. Con cada movimiento, continúan transmitiendo la alegría que ha sido heredada durante siglos.
Lo más asombroso es el salto de la mesa floral. Los artistas colocan la parte delantera del pequeño soporte de la mesa floral, aproximadamente a dos centímetros del borde, sobre sus hombros. Al escuchar el grito de alguien que dice: «¡Al aire, salta!», los ocho participantes levantan los hombros al mismo tiempo, y la mesa floral se eleva en el aire antes de volver a caer firmemente sobre los hombros de los portadores. Este truco tiene un nivel de dificultad muy alto. Cuando la presentación de la mesa floral alcanza su apogeo, miles de flores saltan con cada movimiento exhibiendo poder y destreza.
Representación del salto de la mesa floral en la ciudad de Handan, provincia de Hebei
La mesa floral está generalmente hecha de madera de palisandro o sándalo rojo, con una forma similar a la mesa cuadrada para ocho personas, y puede pesar más de cien kilogramos. Está adornada con una variedad de flores y constituye una estructura elevada en forma de arco. Los paneles laterales de la mesa están tallados con intrincados detalles que representan dragones y aves fénix, y se instala un marco ovalado de flores en los paneles, lo que hace que la mesa floral luzca aún más exquisita. En la parte superior de la mesa están inscritas palabras auspiciosas como «buena cosecha», que representan buenos deseos. En los costados de la mitad de la mesa han sido tallados dos agujeros cuadrados por donde pasan dos grandes postes de madera de unos 5,3 metros de longitud. En los extremos de estos postes se atan barras transversales, y en los extremos de cada barra se colocan dos postes en forma de cruz, atados con cuerda, formando así el soporte de la mesa.
Pei Baolin se ha dedicado a esta actividad por más de 50 años. El evento de elevar la mesa floral se originó durante la dinastía Tang (618-907). Según la leyenda, la danza fue creada por los habitantes para celebrar una vida tranquila y próspera, y ha sido transmitida hasta el día de hoy. La actividad de elevar la mesa floral combina artesanía popular, danza, música de viento y percusión, lo que constituye una actividad folclórica con características culturales locales.
Iluminación de las noches de luna
Al caer el crepúsculo, las hadas voladoras de los murales de Dunhuang llegan bailando y cantando. Las nubes, formadas por luces de colores, parecen tangibles mientras uno pasea entre ellas. Este paisaje onírico proviene de un patrimonio cultural inmaterial de nivel nacional: el Festival Internacional de Linternas de Dinosaurios de Zigong.
La ciudad de Zigong, en la provincia de Sichuan, ya registraba la tradición de encender linternas durante el Año Nuevo en las dinastías Tang y Song (960-1279). Durante las dinastías Ming (1368-1644) y Qing (1644-1911), comenzaron a celebrarse festivales de linternas a mayor escala y en fechas fijas. A principios del siglo XX, tales eventos se celebraban sin interrupción. Cada vez que llega el Festival de los Faroles, la ciudad resplandece con un mar de luces.
En 1964, Zigong celebró su primera Exposición de Linternas para Dar la Bienvenida a la Primavera. Desde entonces, la escala del evento creció, la artesanía pasó de ser tosca a refinada y la presentación de las linternas evolucionó de exhibiciones individuales a conjuntos grupales, de estáticas a dinámicas. La disposición también pasó de ser plana a tridimensional, formando así un espectáculo imponente, con diseños únicos y una deslumbrante belleza artística.
En 1990, el Festival de Linternas de Zigong pasó las fronteras por primera vez y se presentó en Singapur. En más de 30 años, las linternas de Zigong han sido exhibidas en más de 80 países y regiones. Gracias al festival, Zigong ha desarrollado una industria cultural única en torno a los faroles, con más de 1.000 empresas dedicadas a la producción de faroles y más de 100.000 puestos de trabajo en sectores relacionados en toda la ciudad.
Hoy en día, en Zigong, aficionados a los faroles de todos los sectores participan en su elaboración. Wan Songtao es maestro de artesanía de alto nivel en la industria de los faroles y heredero municipal del patrimonio inmaterial, mientras que su padre fue profesor de arte en una escuela secundaria y también uno de los principales miembros del equipo de fabricación de faroles en la antigua Exposición de Linternas para Dar la Bienvenida a la Primavera. «En el Festival Internacional de Linternas de Dinosaurios de Zigong hemos utilizado cerca de 30 materiales especiales. Las técnicas artesanales tradicionales se fusionan con nuevas tecnologías y materiales, lo que da lugar a posibilidades ilimitadas«, explica Wan Songtao.
Desde la preservación de temáticas tradicionales hasta la continua exploración de leyendas mitológicas chinas y extranjeras, así como de obras animadas y caricaturas; desde el uso de técnicas tradicionales como el recorte de papel, hasta la incorporación de elementos de artesanía y las nuevas técnicas; desde simples giros mecánicos hasta la amplia aplicación de tecnologías como el control digital… en Zigong, todo es posible. Los faroles de Zigong destilan el encanto cultural tradicional heredado a lo largo de la historia, al tiempo que concentran la sabiduría y el gusto estético contemporáneo.
Pasear por el Mercado de Flores
A la entrada del Mercado de Flores, acompañados por el intenso aroma de las flores y la música festiva, las personas se sumergen en un mar de alegría.
Dos mujeres de la ciudad de Guangzhou compran en el Mercado de Flores, una de las actividades tradicionales en la víspera de la Fiesta de la Primavera.
«Durante el recorrido, quedé deslumbrada por todo lo que veía y compré un ramo de flores de melocotón. El vendedor me dijo que debía levantarlo bien alto para tener suerte en el amor», comenta emocionada la señora Zhang, una ciudadana de Guangzhou, mientras sigue a la multitud, caminando y disfrutando del ambiente festivo.
Pasear por la Calle de las Flores, también conocido como recorrer el Mercado de Flores de Año Nuevo, es una de las actividades tradicionales más importantes en la ciudad de Guangzhou durante la víspera del Año Nuevo Lunar. Cada año, entre el vigésimo octavo día del duodécimo mes lunar y la víspera del Año Nuevo, las personas salen a las calles y se reúnen en lugares específicos donde, con las flores como protagonistas, celebran actividades culturales que integran las tradiciones del Año Nuevo, la cultura floral y el comercio, todo con el fin de despedir el año viejo, dar la bienvenida al nuevo y rezar por una buena fortuna.
Esta tradición tiene su origen en la ciudad de Guangzhou y está estrechamente vinculada con las excepcionales condiciones geográficas y naturales de la región. La ciudad de Guangzhou goza de un clima cálido durante todo el año, con abundantes lluvias, lo que le ha valido el título de «Ciudad de las Flores». Este entorno ha fomentado una forma de vida en la que las personas aman, admiran y cultivan flores.
«Bajo la coordinación de las autoridades gubernamentales, el Mercado de Flores de Año Nuevo, como una celebración festiva inclusiva, no solo reúne el arte de la construcción de pabellones, la iluminación, la gastronomía local, las artesanías y el folclore, sino que también incluye actividades tradicionales como presentaciones de patrimonio cultural inmaterial, un paseo por los parques y una apreciación de faroles», explica He Yuanfei, subdirector de la Oficina de Cultura, Radio, Turismo y Deportes del distrito de Yuexiu. Expertos de diversos sectores participan activamente en la preservación y representación de esta tradición, convirtiéndola en una plataforma de exhibición de la cultura de Guangzhou.
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