Sólo hace cinco días que el Sevilla vivió una Junta General de Accionistas y su máximo accionistas a nivel individual, José María del Nido Benavente , ha enviado un requerimiento a las oficinas de la entidad de Nervión solicitando una nueva junta, en este caso extraordinaria , que deberá celebrarse en un plazo máximo de dos meses, con el 15 de marzo como fecha más alejada para seguir viviendo la lucha encarnizada por el control del Sevilla. La última reunión de los máximos accionistas despertó nuevas dudas entre las alianzas, aunque ambas partes salieron convencidas de haberse llevado el gato al agua. Dentro de dos meses será el momento de comprobar quién tenía razón, si los actuales dirigentes o Del Nido. La abstención de los americanos ha abierto un nuevo panorama en el accionariado sevillistas, con casi 12.000 acciones cuyo destino no está asegurado. El consejo de administración abrió conversaciones con los nuevos propietarios del paquete de 777 Partners , mientras que el expresidente tenía un pacto privado con uno de los poseedores de estas acciones, cuya vinculación con la nueva empresa que organiza este paquete accionarial aún está por ver. Del Nido Benavente confía en mantener la alianza, aunque A-CAP , la empresa en cuestión, representada en la última junta por Juan de Dios Crespo , está más abierta a vender que a mandar en el Sevilla. Dos meses donde la parte que hace de oposición a los actuales dirigentes tratará de avanzar en sus demandas por lo sucedido en anteriores juntas de accionistas, demostrando con hechos que a Del Nido Benavente no se le ha permitido votar libremente , solicitando que se apliquen medidas cautelares con las que tratar de llegar al poder. Todo ello estando ahora en cuestión la suma total de las acciones y que sin la parte total de los americanos sería capaz de alcanzar el ansiado sillón presidencial. Un Sevilla judicializado y en una continua batalla por el poder, con otros problemas deportivos y extradeportivos que igualmente complican el día a día de la entidad .