Publicado: noviembre 14, 2025, 3:00 pm
Una nueva investigación realizada en Nueva Zelanda ha desarrollado un análisis de sangre que podría revelar e apenas unos minutos si una persona está sufriendo un ataque cardíaco.
Tal y como recoge el Mirror, actualmente, cuando alguien llega al hospital con dolor en el pecho, los médicos toman muestras de sangre para su análisis en laboratorio con el fin de detectar la presencia de troponina, una proteína que se libera al torrente sanguíneo cuando el corazón sufre daños.
Sin embargo, obtener los resultados puede tardar hasta dos horas, lo que retrasa las decisiones y el tratamiento de pacientes que podrían estar sufriendo una emergencia médica crítica.
Ahora, los científicos han ideado un nuevo método para detectar esta proteína que se puede realizar de inmediato y que podría revelar en 20 minutos si alguien ha sufrido un infarto.
Utilizando esta innovadora prueba en una investigación dirigida por el Hospital de Christchurch en Nueva Zelanda, se descubrió que las personas a las que se les realizaron estos exámenes rápidos en seis hospitales fueron ingresadas en una sala o dadas de alta a casa 47 minutos antes, de media.
Nicholas Mills, profesor de cardiología de la British Heart Foundation en la Universidad de Edimburgo, dijo al Mirror: «Cuando las personas acuden al servicio de urgencias temiendo haber sufrido un ataque al corazón, se les toma una muestra de sangre y se envía a otra parte del hospital para su análisis en un laboratorio».
«Para cuando estén disponibles los resultados, es probable que el médico o la enfermera ya hayan tenido que ausentarse, por lo que se producen retrasos desafortunados e involuntarios en la toma de decisiones para los pacientes», prosigue.
«El tiempo medio de espera para obtener los resultados de una prueba de troponina en laboratorio puede ser de hasta dos horas, por lo que las pruebas que se pueden realizar en tiempo real en cuestión de minutos son mucho mejores para los pacientes, ya que reducen la ansiedad mientras esperan una respuesta sobre lo que les está sucediendo», prosigue Mills.
El profesor Mills, que contribuyó al diseño del estudio, declaró: «Fundamentalmente, estas pruebas también podrían aliviar parte de la presión sobre los departamentos de urgencias saturados, ayudando a que las personas sean atendidas más rápidamente».
