Publicado: diciembre 2, 2025, 12:30 am
La peste porcina africana (PPA), una enfermedad que puede terminar con los cerdos después de varios días de fiebre, hemorragias y tos, ha vuelto a España después de casi treinta años. La Generalitat de Cataluña ha activado el Plan de contingencia ante la PPA tras confirmar dos casos positivos en jabalíes que fueron hallados sin vida los días 25 y 26 de noviembre en Cerdanyola del Vallès (Barcelona). Estos casos, que fueron confirmados por el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid), suponen la primera detección desde 1994, un hecho que ha provocado que las exportaciones de este tipo de carne se hayan visto afectadas.
España es el primer productor de porcino de la Unión Europea (UE) y el tercero del mundo, por detrás de Estados Unidos y China. Nuestro país exportó el año pasado en carne de porcino y derivados 8.800 millones de euros a 104 países, de los que el 58% correspondía a miembros de la Unión Europea (UE). Esto supone unos 5.100 millones de euros.
Los países que han vetado el cerdo de España
Existen más de 400 certificados de exportación de productos porcinos. Estos son los países, según recoge el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que han hecho el veto a la carne de cerdo de nuestro país tras la detección de casos de peste porcina:
- Armenia
- Bielorrusia
- Kazajstán
- Kirguizistán
- Rusia
- Bolivia
- Bosnia-Herzegovina
- Brasil
- Cabo Verde
- Canadá
- Chile
- Colombia
- Costa Rica
- Cuba
- Ecuador
- EEUU
- Filipinas
- Ghana
- Guatemala
- Honduras
- Japón
- México
- Namibia
- Nicaragua
- Paraguay
- Perú
- República Dominica
- Serbia
- Singapur
- Seychelles
- Sudáfrica
- Tailandia
- Taiwán
- Ucrania
- Uruguay
- Venezuela
- Vietnam
- Malasia
El caso particular de China
China es uno de los países que más demandan la carne de porcino española. De hecho, el país asiático constituye una parte muy importante en las exportaciones (570,7 millones de euros en 2024). El ministro de Agricultura, Luis Planas, afirmó que existen «muy buenas relaciones diplomáticas» con este territorio. De hecho, en el reciente viaje de los Reyes de España se firmó un protocolo para proteger las exportaciones de porcino por esta enfermedad. En él se limitaba el veto a las exportaciones de las zonas infectadas.
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha informado que el gigante asiático ha suspendido «la exportación de carne y productos cárnicos, proteína hidrolizada y petfood de origen porcino procedentes de la provincia de Barcelona«. Concretamente, ha bloqueado las de 12 empresas catalanas. Sin embargo, sí mantienen las exportaciones de estos productos de otras zonas de España. Y también ha suspendido «la exportación de tripas de porcino para calibración de toda España».
Planas ha asegurado que de los 104 países a los que se exportó el año pasado, 44 de ellos piden «requisitos sanitarios específicos. De este último grupo, 24 países son los contemplan la ‘regionalización». Es aquí donde está China y también otras zonas como Filipinas, Corea del Sur, Reino Unido y Serbia. Por otro lado, otras como las ya mencionadas anteriormente como, por ejemplo, Japón, Malasia, Taiwán y México, han cerrado sus mercados al cerdo español, sin hacer distinción entre las áreas afectadas y las libres de enfermedad.
Las restricciones para evitar la propagación
Los casos positivos se han dado en el término de Cerdanyola. Esto ha hecho que la Generalitat haya establecido dos radios de 6 y 20 kilómetros con restricciones para poder contener este contagio que afecta a 12 y 64 municipios, respectivamente.
En el primer radio, es decir, el de 6 kilómetros, se ha decretado el cierre total de acceso al medio natural. Tampoco se pueden realizar actividades de caza o trabajos forestales y queda prohibida cualquier actividad en zona rústica por motivos de bioseguridad. Se han instalado barreras físicas y química, además de trampas para controlar a los jabalíes.
Los 12 municipios afectados por estas restricciones son: Sabadell, Sant Quirze del Vallès, Polinyà, Santa Perpètua de la Mogoda, Montcada i Reixac, Ripollet, Barberà del Vallès, Badia del Vallès, Cerdanyola del Vallès, Sant Cugat del Vallès, Terrassa y Rubí.
Y en el segundo perímetro de seguridad que incluye a 64 municipios, el de 20 kilómetros, se aplican una serie de medidas específicas: limitación de actividades de ocio, caza o vinculadas a la biodiversidad, quedan prohibidas las actuaciones que interfieran en las labores de control poblacional y bioseguridad y también el acceso a la totalidad del Parque del Collserola.
