Publicado: noviembre 14, 2025, 10:00 am
La enfermedad hepática, un término paraguas que comprende todas las patologías que afectan al hígado, es actualmente causante de cerca del 4% de muertes anuales en el mundo. Entre las diversas condiciones que reúne, la más común es la enfermedad hepática esteatósica asociada a disfunción metabólica (MASLD, por sus siglas en inglés), que puede conducir a complicaciones más graves como fibrosis hepática o incluso cirrosis.
Se han identificado varios factores de riesgo importantes de la MASLD, incluyendo el uso de ciertos medicamentos de prescripción, condiciones como la diabetes o el síndrome metabólico o cuestiones del estilo de vida como el tabaquismo, la falta de ejercicio físico o llevar una dieta poco saludable. Ahora, un nuevo estudio ha encontrado que la exposición a una sustancia química común llamada tetracloroetileno (PCE) presente en muchos productos de limpieza en seco y domésticos podría triplicar el riesgo de fibrosis hepática.
Tres veces más riesgo de fibrosis hepática
Según explican los autores de este trabajo en el medio científico Liver International , para llegar a esta conclusión analizaron datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de entre 2017 y 2020 y de más de 1.600 adultos. En concreto, tuvieron en cuenta los niveles de PCE en la sangre y los diagnósticos de fibrosis hepática.
De esta forma, encontraron que alrededor del 7% de los participantes tenían niveles detectables de PCE en la sangre, y estas personas tenían tres veces más probabilidades de recibir un diagnóstico de fibrosis hepática que aquellos en cuya sangre no se encontró la sustancia química.
Los investigadores aclaran que, cuando el hígado metaboliza el PCE, los metabolitos (sustancias químicas producto de esta actividad) reaccionan con las células hepáticas y degradan los lípidos presentes en la membrana celular. Esto inicia una reacción en cadena que provoca inflamación y cicatrización, que es el rasgo patológico de la fibrosis hepática.
Una relación dosis-dependiente
De hecho, la relación documentada entre la presencia de PCE en la sangre y el riesgo de fibrosis hepática era dependiente de la dosis, lo que aporta robustez a la teoría de que el producto químico causa la enfermedad frente a otros tipos de correlación.
Teniendo en cuenta esta nueva evidencia, los científicos afirman que estos resultados deben trasladarse a las estrategias de cribado que pueden ayudar a detectar más tempranamente la enfermedad hepática y a las políticas medioambientales para prevenir la condición y proteger a las personas de la exposición a sustancias químicas potencialmente dañinas.
Hay que tener en cuenta que el PCE, que se encuentra en productos domésticos como pegamentos, limpiadores de frenos, desengrasantes de metal, decapantes, lubricantes de silicona o impermeabilizantes, no sólo se han relacionado con el riesgo de desarrollar problemas hepáticos sino también con problemas renales, neurotoxicidad o determinados tipos de cáncer como el de vejiga o el linfoma no-Hodgkin.
Referencias
Yinan Su, Jennifer L. Dodge, Brian P. Lee. Tetrachloroethylene Is Associated With Presence of Significant Liver Fibrosis: A National Cross-Sectional Study in US Adults. Liver International (2025). DOI: https://doi.org/10.1111/liv.70398
