Publicado: noviembre 14, 2025, 6:30 am
Aunque, a menudo, los asuntos relacionados con la salud íntima femenina están rodeados de tabúes y prejuicios, Natalia Osona no tiene ningún reparo en hablar abiertamente de ello a través de sus redes sociales. Sin embargo, este aparente exceso de transparencia de la influencer le ha acarreado duras críticas en más de una ocasión.
Hace unas semanas, por ejemplo, la madrileña compartía con naturalidad su inusual episodio de sangrado vaginal entre ciclos menstruales. Algo que, más tarde, ella misma justificó públicamente destacando la necesidad de dar visibilidad a este tipo de experiencias. «Gracias a vosotras descubrí lo del SIBO y empecé a encontrar respuestas», señalaba Osona.
Ahora, después de su visita al ginecólogo, la influencer ha documentado en redes sociales su positiva experiencia utilizando por primera vez la copa menstrual, a la que ha descrito como su «mejor descubrimiento» gracias a su carácter «práctico» e «higiénico», así como por el ahorro que le supone al poder extender su uso entre cinco y diez años.
«Os prometo que llevo la peor regla en años. Lleno la copa en menos de dos horas. Estoy que no puedo con mi alma», empezó diciendo Natalia a través de sus historias de Instagram, expresando su preocupación por su «regla abundante» que, tras consultarlo a ChatGPT, acabó atribuyendo al tratamiento médico con cortisona en el que estuvo inmersa.
En este sentido, la creadora de contenido ha aclarado que, generalmente, la copa «aguanta ocho horas sin problema». «Es mi segundo ciclo con ella y me da pena haber empezado a usarla con 35 años. Pero oye, nunca es tarde», indicó la influencer, haciendo hincapié en que es «lo más cómodo, limpio y eficaz» que ha probado hasta la fecha.
Acompañando su propio testimonio, Osona publicó una fotografía de su copa menstrual, la cual, más tarde, aclaró que aún no había sido utilizada y estaba completamente «limpia». «Puede que a algunas personas les choque ver una copa menstrual así de cerca en un story», admitió la joven, consciente de que se trata aún a día de hoy de un tema «incómodo».
No obstante, en lugar de recular, la madrileña se reafirmó en la importancia de abordar con naturalidad este tipo de temas para «quitar muchos miedos» a los demás. «Al final, tengo un altavoz que llega a muchas mujeres, y creo que hablarlo en público solo nos hace bien: más información, menos tabúes y más libertad para decidir lo que es mejor para nosotras», concluyó.
