Publicado: febrero 26, 2025, 8:10 pm
Hamás ha entregado en la madrugada del jueves cuatro cuerpos de israelíes muertos en Gaza durante su cautiverio. Israel ha cumplido también su parte al liberar a cambio a más de 600 detenidos palestinos, lo que pone fin a los intercambios previstos en la primera fase del alto al fuego. La oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha confirmado la receepción de los cuerpos y su identificación ha comenzado de manera inmediata, según AFP. Israel ha confiado en que la entrega de los cuatro féretros se hiciera «conforme a las exigencias israelíes», es decir, «sin ceremonias de Hamás». Según medios israelíes, los cuatro cuerpos son de Ohad Yahalomi, Tsachi Idan, Itzik Elgarat y Shlomo Mansour, lo que confirma los nombres comunicados previamente por Hamás. Hamás ha confirmado la llegada de presos palestinos a , que habían viajado «desde la prisión de Ofer para su traslado a autobuses palestinos en el paso fronterizo de Kerem Shalom», y de ahí a Ramala. El movimiento islamista espera que sean los 625 prisioneros palestinos que habían acordado para completar esta primera fase de la tregua. Hasta hace unos días, el acuerdo se tambaleó ante la negativa de Israel de realizar este último canje. Uno de los motivos del Gobierno israelí fue que en la anterior entrega de cuerpos de secuestrados por parte de Hamás no se encontraba la madre Bibas junto a sus hijos, como estaba previsto. Tampoco sentaron bien las tensiones generadas por el despliegue propagandístico con el que Hamás ha buscado protagonizar la liberación de los 33 rehenes. Tras casi quince meses de guerra en la Franja de Gaza, desencadenada por el ataque de los milicianos islamistas en suelo israelí el 7 de octubre de 2023, Israel y Hamás alcanzaron un acuerdo de alto el fuego que contempla tres fases. La primera, en vigor desde el 19 de enero, termina el 1 de marzo y, durante la misma, Hamás debía devolver a Israel 33 rehenes, ocho de los cuales sin vida, a cambio de la liberación de unos 1.100 presos palestinos. Hasta ahora, Hamás liberó a 25 rehenes y devolvió a Israel los cuerpos de otros cuatro, y más de 1.100 prisioneros palestinos fueron liberados. Entre los cuerpos que entregó Hamás la semana pasada, se encontraban los de la rehén israelí de origen argentino Shiri Bibas y los de sus dos hijos, Kfir y Ariel, muertos en cautiverio en Gaza y convertidos en símbolos de la tragedia de los rehenes del país. Este miércoles, miles de personas se congregaron al borde de carreteras para acompañar su cortejo fúnebre y el Parlamento israelí guardó un minuto de silencio en homenaje suyo y de otras víctimas del 7 de octubre. Durante el funeral, celebrado cerca del kibutz Niz Or , en el sur de Israel, donde se produjo el secuestro, la familia instó a los dirigentes israelíes a asumir la responsabilidad de la muerte de sus parientes. «Podrían haberlos salvado, pero prefirieron la venganza», dijo Ofri Bibas, cuñada de Shiri. Con todo, el acuerdo de alto al fuego, muy frágil, ha estado al borde del colapso varias veces porque ambos bandos se acusan mutuamente de violarlo. El ejército israelí afirmó el miércoles que había bombardeado puestos de lanzamientos de proyectiles en Gaza, tras haber identificado un tiro. Los términos de la segunda fase del acuerdo , que debería poner fin al conflicto y conducir a la liberación de todos los cautivos que continúan en Gaza, todavía no se han negociado. La tercera y última fase estará destinada a la reconstrucción de la Franja de Gaza. El martes por la noche, el enviado estadounidense a Oriente Medio, Steve Witkoff, dio cuenta de «mucho progreso» de cara a una reanudación de las conversaciones. Según él, Israel iba a enviar un equipo de negociadores «a Doha o a El Cairo, donde las negociaciones reiniciarán». Sin embargo, Israel no confirmó esta información. De los 251 rehenes secuestrados el 7 de octubre en Israel, 62 continúan retenidos en Gaza, de los que 35 estarían muertos, según el ejército israelí. Israel prometió destruir a Hamás tras los ataques del 7 de octubre que desataron la guerra en Gaza tras dejar más de 1.200 muertos, en su mayoría civiles, según un balance de AFP basado en cifras oficiales. La respuesta israelí en Gaza cobró la vida de más de 48.000 personas, según el Ministerio de Salud del territorio gobernado por Hamás. La ONU considera que esas cifras son fiables.