Publicado: febrero 27, 2025, 8:54 am
Una mayor adherencia a la dieta mediterránea está asociada con una reducción del 6% en el riesgo de desarrollar cánceres relacionados con la obesidad. Los resultados han sido publicados en la revista ‘ JAMA Network Open ‘ forma parte del estudio EPIC ( European Prospective Investigation Into Cancer and Nutrition ) que entre 1992 y 2000 analizó a más de 521.000 personas de entre 35 y 70 años en 23 centros de 10 países europeos. Para este análisis em concreto, se incluyeron 450.111 participantes tras excluir a aquellos con diagnósticos previos de cáncer u otros factores que pudieran alterar los resultados. Los investigadores analizaron la alimentación mediante cuestionarios específicos de cada país y clasificaron a los participantes según su grado de adherencia a la dieta mediterránea. Los resultados mostraron que durante un seguimiento medio de casi 15 años, el 4,9% de los participantes desarrolló algún tipo de cáncer relacionado con la obesidad. Aquellos con una alta adherencia a la dieta mediterránea presentaron un menor riesgo de padecer estos cánceres en comparación con quienes tenían una adherencia baja. En particular, se observó una reducción del riesgo en cáncer colorrectal, hepático y renal. De acuerdo con el estudio, los beneficios de la dieta mediterránea podrían estar relacionados con factores como la inflamación, la sensibilidad a la insulina y la microbiota intestinal. Además, sugieren que la menor incidencia de cáncer podría deberse no solo a los beneficios de esta dieta, sino también a la menor ingesta de alimentos ultraprocesados, los cuales han sido asociados a un mayor riesgo de diversas enfermedades. Este estudio representa un paso importante en la comprensión de la relación entre la alimentación y el cáncer, y refuerza la importancia de seguir una dieta equilibrada y saludable para la prevención de enfermedades . Investigaciones futuras podrán arrojar más luz sobre los mecanismos específicos involucrados y sobre el papel de los alimentos procesados en el desarrollo del cáncer. Si bien no forma parte de este estudio EPIC, es plausible que el menor riesgo de cáncer asociado con una mayor adherencia a la dieta mediterránea pueda reflejar en parte un menor consumo de alimentos altamente procesados o ultraprocesados, en lugar de cualquier efecto positivo para la salud de la dieta mediterránea en sí. Las personas con una alta adherencia a la dieta mediterránea consumen más frutas, verduras, cereales integrales y pescado. Los alimentos altamente procesados no forman parte del índice de la dieta mediterránea (es decir, comer más alimentos procesados reduciría la adherencia a la dieta mediterránea).
