El lenguaje del racismo - España
Registro  /  Login

Otro sitio más de Gerente.com


El lenguaje del racismo

Publicado: julio 17, 2025, 10:07 pm

El debate migratorio se ha perdido entre las malditas matemáticas, cuando, como en todas las cuestiones identitarias, lo relevante es el lenguaje. El brote al que asistimos desde hace días no se desencadenó en Torre Pacheco, sino en unas declaraciones de la dirigente de Vox Rocío de Meer. Dijo: «Hay algo que no te han contado, lo que sí puede desaparecer es tu Nación». El agente exterminador serían los de fuera.

Si son uno, cinco u ocho los millones de migrantes que ha puesto Vox como objetivo de la deportación masiva carece de mucho interés en comparación con lo que supone expresar la cuestión en términos existenciales. Si existen ellos, no puedes existir tú. La supervivencia exige que uno de los dos se evapore. Es, por ejemplo, como afrontan su conflicto Netanyahu y Hamas, aunque con otras herramientas.

Hasta ahora el discurso antiimigratorio de Vox se había movido en niveles ligeramente inferiores al racismo binario que fundamenta la tan extendida y tan fascista «teoría del reemplazo». Tan sólo Silvia Orriols, la líder del partido neonazi Aliança Catalana, apelaba a esa retórica para exigir la desaparición de su territorio tanto de musulmanes como de castellanoparlantes (no quiero pensar ya lo que haría con los musulmanes castellanoparlantes).

Después de la Dictadura de Franco, que entre sus sustratos (in)morales tenía la raza, el terrorismo de ETA era el único que llevaba la teoría del «o ellos o nosotros» a la práctica. De hecho Oscar Matute, diputado de la ex Batasuna, dijo hace justo una semana: «EH Bildu impedirá por instinto de supervivencia como pueblo la llegada del PP al poder». Por algún motivo, nadie en la izquierda se llamó a escándalo. Bueno, por uno: porque la izquierda camufla la xenofobia en el nacionalismo amable y diverso (oxímoron).

Matute es, al parecer, el moderado del partido que años atrás sirvió de arma política a los pistoleros. No es de extrañar que hable de combatir al adversario en los mismos parámetros existenciales que Rocío de Meer. Del racismo es muy difícil rehabilitarse. Ahí están los británicos, tan formados y educados, que después de llevar a su país al abismo del Brexit por tragarse las soflamas xenófobas de Ukip siguen dando alegrías electorales a Nigel Farage.

El punto de difícil retorno se produce cuando la xenofobia trasciende del mero sentimiento instintivo de desconfianza ante el diferente a su institucionalización como opción política viable. Es ahí donde Vox y Aliança Catalana sitúan su desafío a la convivencia con todo el mainstream ultraderechista remando a su favor. No hay más que ver cómo van en las encuestas.

Los Trump, Farage, Le Pen, Orban, Bolsonaro y demás caudillos identitarios dominan la conversación política mundial por causas que tienen que ver con la desaparición de la clase media en el proceso globalizador. Hay una vía bastante recta para que aumenten su poder: etiquetar a sus votantes como una panda de paletos a quienes ya se les pasará la tontería.

Related Articles