Publicado: noviembre 22, 2024, 5:07 pm
En una nueva inversión empresarial llegada a Aragón, Solarig, una compañía especializada en energías renovables, ha decidido construir en Teruel una planta de fabricación de biocombustible destinado a la aviación por un total de 1.150 millones de euros.
Un proyecto que ayudará a la generación de más de 1.200 puestos de trabajo (1.000 durante la fase de construcción y más de 180 durante la operación) que verá la luz en 2029 y que, cuando pueda funcionar a pleno rendimiento, podrá producir más de 75 toneladas de combustible verde al año, el equivalente a 33.000 vuelos entre Zaragoza y Londres.
La refinería de combustible sintético para la aviación se levantará sobre una superficie de cerca de 100.000 metros cuadrados (10 hectáreas) de Platea sobre la que Solarig tiene una opción de compra, pese a que, según ha expresado el consejero de Fomento del Gobierno de Aragón, Octavio López, todavía no la han ejercido. Por ello, el único representante gubernamental que se ha pronunciado al respecto ha querido hacer un llamamiento a la «prudencia» hasta que «se vayan conociendo más datos sobre el proyecto y la forma en la que quieren llevarlo a cabo».
Durante el anuncio del proyecto, hecho con motivo de la celebración de la COP29 en Azerbaiyán, Miguel Ángel Calleja, Presidente y Consejero Delegado de la empresa, destacó que «esta instalación sitúa a Teruel en una posición de vanguardia en cuanto al desarrollo de producción de combustibles sostenibles, para lo que contamos con una gran cantidad de recursos naturales de la región como son el sol, el viento y el agua, así como con el aprovechamiento del biometano y el CO2 biogénico de nuestras instalaciones, producido a partir de residuos agroganaderos de la comarca». A su vez, Calleja ha señalado que «el proyecto cuenta con el apoyo de tanto entidades públicas nacionales, autonómicas y locales, como de diferentes empresas líderes del sector de la aviación».
Además, con la intención de consolidar financieramente el proyecto, Solarig confía en obtener fondos europeos, para lo que lo ha presentado a la convocatoria ‘Valles de Hidrógeno’, dotada con 1.200 millones de euros y cuya resolución está pendiente tras cerrarse el plazo de presentación de solicitudes el pasado 29 de octubre. La compañía, según explica en su nota de prensa, busca así contribuir a los objetivos europeos de lucha contra el calentamiento global y promover la producción y consumo a gran escala de hidrógeno renovable y sus derivados.
