Sánchez minimiza la decisión del juez de fiscalizar las cuentas de Begoña Gómez: «Se verá que es una mujer pulcra y honesta»

De nuevo, un viaje oficial de Pedro Sánchez fuera de España y, de nuevo, decisión del juez Juan Carlos Peinado que afecta a su mujer. El magistrado ordena rastrear las cuentas corrientes en las que figure como titular Begoña Gómez y, además, se dirige al Registro Civil de Madrid «a fin de que emita certificado literal de matrimonio, con sus anotaciones marginales». El mantra que sale de La Moncloa se repite en esta ocasión para valorar una nueva decisión en el marco de la investigación judicial: «Absoluta tranquilidad».

Hace meses, el Gobierno tenía la previsión de que la Audiencia Provincial de Madrid diera carpetazo en septiembre a la investigación judicial a Gómez, pero toda vez que eso no se produjo, se asume que, como en el caso Koldo, será una causa que acompañe la legislatura. En todo caso, la estrategia del Ejecutivo sigue siendo la de restar trascendencia a las actuaciones de Peinado. «Absoluta tranquilidad y absoluta transparencia», ha expuesto Pedro Sánchez desde Río, donde ha acudido a la cumbre del G20, precisamente acompañado por su eposa.

De hecho, el presidente del Gobierno ha tirado de ironía para valorar la nueva decisión del magistrado: «Si se quiere investigar el estado de las cuentas de mi esposa, perfecto. Se verá que es una mujer pulcra, honesta y un estado de las cuentas que refleja el estado de cualquier profesional trabajadora como millones de personas en este país». Y, además, sobre pedir el «certificado de matrimonio», ha valorado: «Si quiere comprobar que estamos casados no hay problema».

«Procédase, a través del Punto Neutro Judicial, a consultar la numeración de las cuentas corrientes en las que figure como titular la investigada Begoña Gómez», recoge la resolución de Peinado. Asimismo, en la providencia, el instructor manda librar un oficio al «Registro Civil Único de Madrid a fin de que emita certificado literal de matrimonio, con sus anotaciones marginales, de la investigada Begoña Gómez». Fuentes jurídicas informan de que el instructor quiere conocer si el matrimonio Sánchez-Gómez se encuentra casado en régimen de gananciales o separación de bienes.

En la delegación española que ha acompañado a Sánchez hasta Río se encuentra su esposa, Begoña Gómez, que apeló a este viaje para aplazar su citación ante el juez Juan Carlos Peinado prevista para este lunes y pospuesta hasta el 18 de diciembre. Aunque es habitual que las o los consortes de los líderes políticos viajen a las cumbres de los G20 y tengan una agenda paralela.

En la invitación que cursó Janja Lula da Silva a Gómez se detalla que ésta tendrá «asiento en la sesión plenaria junto a la delegación de su país, también habrá una sala reservada para los cónyuges y un espacio para reuniones bilaterales que quiera organizar». Gómez ha asistido a algunas de las intervenciones que ha realizado Sánchez, aunque este martes no se ha desplazado a la cumbre ya que, según fuentes de Moncloa, ha tenido «agenda privada».

Unas horas antes de la comparecencia de Sánchez desde Río, en Madrid, la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, ha recurrido a una expresión que suele utilizar el Gobierno para referirse a las decisiones judiciales sobre el caso de Gómez, según ha indicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en La Moncloa.

«Lo que les puedo trasladar en nombre del Gobierno es confianza en la justicia. Y, desde luego, confianza en que la verdad pondrá más pronto que tarde las cosas en su sitio», ha trasladado la portavoz gubernamental sin entrar en más detalles.