Pedro Sánchez piensa en Óscar López como posible rival de Isabel Díaz Ayuso en las elecciones de 2027. Es la opción principal que baraja el secretario general del PSOE para la difícil plaza madrileña, en la que los socialistas no gobiernan desde que en 1995 Joaquín Leguina perdiera el poder, hace ya más de 29 años.
El ministro de Transformación Digital y de la Función Pública es la opción preferida del presidente del Gobierno, aunque no lo ha decidido aún en firme. Así lo adelantó elDiario.es y lo ha confirmado EL MUNDO en fuentes socialistas. «Ahora» no es el momento, apuntan fuentes gubernamentales, de dar el paso, pero la decisión está muy madurada, añaden.
En Ferraz lo dan por hecho: «Es cierto». Y apuntan a una movilización nacional del partido en favor de López, que hasta hace dos meses venía ejerciendo el cargo de director del Gabinete del Presidente, uno de los cargos de mayor peso político específico de todo el Ejecutivo.
López es madrileño, aunque ha desarrollado gran parte de su carrera política en Castilla y León, de donde es natural su familia. Allí fue secretario general del Partido Socialista y líder de la oposición en las Cortes entre 2008 y 2012. Ese año pasó a ser secretario de Organización del PSOE, hasta 2014, y, posteriormente, fue portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Senado, de 2015 a 2016.
Su candidatura no sorprendería en la medida en que el entorno de Sánchez no esconde que quiere cambiar a Juan Lobato. Hay que recordar que este diario adelantó el pasado 2 de septiembre que la convocatoria del 41º Congreso Federal del PSOE no sólo le servirá a Pedro Sánchez para blindar su liderazgo en pleno debate interno sobre la financiación y sobre las desigualdades que produce el concierto catalán pactado con ERC, sino que también le dará pie a moldear un PSOE más a su medida, con nuevos liderazgos en Castilla y León, Aragón o la Comunidad de Madrid.
«En Moncloa no lo quieren»
El de Lobato es el caso más llamativo: «En Moncloa no lo quieren», resumían ya entonces en Ferraz. El líder socialista madrileño no tiene buenas referencias de algunos de los principales alfiles madrileños de Sánchez, como Félix Bolaños. Tampoco el propio Óscar López.
Según fuentes de la Federación Socialista Madrileña, Lobato está recibiendo este sábado multitud de mensajes de apoyo frente a la injerencia que prepara La Moncloa. Lobato cuenta con tener el apoyo de la militancia rasa, mientras que los cuadros orgánicos del partido se alinearían con el candidato de Sánchez. Ésas son las cartas sobre la mesa a esta hora.
Sin embargo, en el entorno del ministro López añaden que se trata de los dimes y diretes internos propios de un partido al borde de un congreso federal, a los que no dan importancia en este momento. «Ahora» no están en eso repiten.
En todo caso, se da por hecho que Ferraz no formalizaría el impulso ministro hasta después del Congreso Federal del PSOE, que se celebrará entre el 29 de noviembre y el 1 de diciembre en Sevilla, aunque tampoco puede demorar mucho la decisión.
Según el calendario establecido por el PSOE de Madrid, los aspirantes a liderar el partido tendrán que presentar sus precandidaturas el 7 de diciembre, seis después de que concluya el cónclave nacional del partido, aunque las primarias en el caso de que hubiera más de un aspirante no se celebrarían hasta el 11 de enero.
La dirección nacional realizó en septiembre una «exploración» de potenciales sucesores de Lobato sin que trascendiera que se hubiera llegado a una conclusión concreta, lo que propició que las quinielas se llenaran de nombres, entre ellos, el del delegado del Gobierno en Madrid, Fran Martín.
También figura en ellas el alcalde de Fuenlabrada, Javier Ayala, el compañero al que el todavía secretario general se impuso hace tres años en el pulso por el control de la organización en el ámbito autonómico y en cuyo equipo responden a la pregunta de si estaría dispuesto a volver a presentarse que «ahora no el momento de los liderazgos regionales».