Donald Trump prometió cambiarlo todo con su llegada a la Casa Blanca, oficialmente prevista para el próximo 6 de enero de 2025, y así lo está haciendo. El republicano anunció hace unos días el nombramiento del multimillonario Jared Isaacman al frente de la agencia estadounidense NASA. El nombre de Isaacman destaca desde hace años como uno de los grandes amigos de Elon Musk, de su empresa SpaceX y, en general, de las misiones privadas al espacio. Hace unos meses, de hecho, se convirtió en el primer civil en viajar al espacio en la misión privada Polaris Down y en realizar una caminata a gravedad cero. ¿Podría, pues, Isaacman iniciar una revolución para privatizar aún más las misiones espaciales y, por ejemplo, beneficiar a los proyectos de su amigo Musk?